Día 7: Tiruchirappalli / Trichy - Madurai

Hoy ha sido un día relativamente tranquilo y digo relativamente porque me he cansado más que estos días de atrás. Ha sido la inactividad. Además no hemos ni madrugado.

De Trichy a Madurai sólo hay 136 km, por ello hemos parado en dos lugares. 

La primera parada ha sido en Thirumayam donde hemos visitado un templo estupendo, fuera de programa. El asunto de parar ha sido porque el conductor es muy devoto de Vishnu y nos lo ha enseñado. Mira por donde había una boda y al final nosotras hemos sido la novedad. Según nos cuentan por aquí las bodas pueden durar hasta una semana.

Después hemos hecho otra parada en un pueblo prácticamente abandonado llamado Chettinad, con un montón de mansiones donde sólo viven los criados. Los dueños viven en otros países pero mantienen las mansiones.

A continuación hemos seguido a Madurai, otra ciudad enorme, pero un poco mejor que la anterior Trichy, y según nos cuentan más peligrosa también. Hemos comido en un restaurante 100% indio recomendado por TripAdvisor. No hemos comido mal, pero sin llevar especias según ellos picaba un poco. Después hemos visitado una pastelería monísima de la muerte, y después hemos ido a un lugar de venta de objetos de artesanía, joyas y demás. De joyas me han enseñado mogollón y claro como conozco muchas piedras es una risa. Al final me he comprado un anillo de topacio amarillo con zirconitas. Me lo han dejado en 27 €. Me enseñaban zafiros, pero francamente me parecen muy vulgares. Lo que me parecen es carísimos porque escasean bastante y claro encima en plata, pues muy mal.

Luego hemos llegado al hotel que está a tomar por culo, pero tiene unas vistas cojonudas y tengo una habitación como una plaza de toros, con un tresillo, una mesa de comedor con cuatro sillas en una especie de mirador, un armario destartalado y un baño muy moderno. Os mandó fotos del vecino pavoneandose, el muy cabrón.

Y esto es todo por hoy amiguitos.